martes, 21 de diciembre de 2010

El Diciembre de Oriane,

¿Y será que llueve y siempre que llueve pienso más de la cuenta en lo que nunca quiero pensar?
Pero nunca entenderé que tiene Diciembre...Mi mágico Diciembre...
Un mes que siempre consigue llenarme de esa magia de sonreír por sonreír, de sentir que me vas a llamar otra vez y vas a volver a decir las palabras mágicas que consiguen que yo me olvide de cada mal rato. Y magistralmente consigues dibujar mi sonrisa de tonta en unos ojos que justo antes estaba llorando como si fueses un ilusionista. Sí, eso es. Un ilusionista...Apareces y desapareces sin que nadie sea nada, cambias mi percepción del mundo, haces que crea el castillo que montas a nuestro al rededor...
Sé que se acabará, que un día Diciembre dejará de ser mágico porque tú dejarás de recordarme...o yo dejaré de recordar los buenos momentos...pasará a la historia como el Diciembre más tonto, cariños, revoltoso y agresivo de dos personas...



Oriane.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

De lobos y ovejas.

¿Cuántas noches había pasado sin poder dormir? Al menos las noches que no durmió fue por entregarse al placer, por hacer lo que le apetecía...