lunes, 17 de febrero de 2014

Sinceramente.

Oriane estaba sentada mientras Aleixo la miraba. Estaba triste y él quería besarla. Lo intentó, pero ella se giró antes de que su boca la quemara.
-No puedo. No puedo dejar que me beses. Porque solo quiero que me beses se vas a quererme solo a mi, y sé que no puedo pedírtelo. No a ti, no ahora. Quiero que me quieras, a mi. Como soy. Con todo lo que conlleva. Sé que no puedes, por eso bésame cuando puedas ser solo mío. Yo seguiré aquí, siendo tu amiga. Espero que cuando puedas quererme yo siga queriéndote a ti.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

De lobos y ovejas.

¿Cuántas noches había pasado sin poder dormir? Al menos las noches que no durmió fue por entregarse al placer, por hacer lo que le apetecía...